martes, 15 de septiembre de 2015

POEMAS DEL ALMA LXIV





Los entristecidos arboles del huerto
aquellos que se movieron con desconcierto
Vieron partir  de la casa mis pies con acierto
en el frío atardecer de un otoño ya yerto

Cayeron muchas lágrimas por aprecio
Como frutos maduros al paso el viento
La voz de las ramas llamaban en silencio
viendo volver a mis  dos pies con aliento...

Por Alfonso Jara